Los alumnos universitarios padecen y/o disfrutan a diario de numerosos perfiles de docentes. Existen distintos parámetros que pueden ayudarnos a conocer los diferentes tipos de profesores a los que estamos expuestos. ¿Cuál es el que más te gusta?
Hacia la búsqueda del mejor profesor universitario
Autoritario, clásico, moderno, friki, anárquico, cercano…podríamos hablar de numerosos perfiles de docentes en la universidad, pero vamos a comentar en este post algunos de ellos.
Todos quienes han pasado por la universidad se han encontrado con diversa tipología de docentes. En algunas carreras universitarias predomina más un tipo que otro. Recuerdo mis tiempos de estudiante donde cada profesor era un mundo, de unos aprendí mucho y de otros aprendí a ser autodidacta. Era increíble observar como la forma de dar clase afectaba directamente a la participación del alumnado y al buen o mal ambiente en el aula.
En ocasiones, sucede que los alumnos se matriculan en una materia cuya temática les encanta pero finalmente se convierte en una relación de amor-odio debido a la forma de impartir docencia. Por el contrario, también tenemos el caso opuesto, donde un alumno cursa una materia aparentemente no atractiva pero luego es el propio docente quien conduce correctamente la clase para que todos los alumnos la amen y disfruten.
Y aquí está la gran riqueza de la docencia y su metodología. Cada materia y cada docente será un escenario completamente diferente donde el alumnado deberá adaptarse a las condiciones de enseñanza-aprendizaje establecidas en el aula para poder sobrevivir o disfrutar de la materia.
El autoritario
Es seguramente el peor docente que uno pueda tener. En sus aulas no existe una comunicación al mismo nivel entre profesor y alumno. El profesor es sólo la única persona que habla en clase, sus clases son tediosas, pesadas y no invitan en ningún momento al diálogo o a la libertad de expresión. Los alumnos asienten todo el tiempo y se presentan en el aula con una gran desmotivación y nervios ante posibles preguntas que pueda formular en clase y represalias que tome el docente al no saberlas.
El clásico
El docente clásico es un paso evolucionado del autoritario, se despoja de esa autoridad abusiva y empieza a invitar al alumnado a que intervenga, sin tener todavía mucha presencia esa participación activa en el aula. El clásico suele utilizar métodos clásicos de enseñanza y posee un gran conocimiento pero seguramente algo desfasado en ciertos ámbitos.
Suele vestir con ropa clásica, corbatas, camisas…y llevar un maletín de piel o similar. Apenas utiliza el ordenador portátil y las TIC. Su actitud tiende hacia la seriedad aunque de vez en cuando se le puede sacar una sonrisa, ya que detrás de ese clásico traje de los 80 se esconde un corazón humano.
El moderno
El profesor moderno se diferencia del resto debido al uso de las TIC en el aula. Presentaciones de powerpoint, tablets, portátiles, aplicaciones para móvil, programas informáticos, etc. todos ellos son referenciados por el docente. El alumno se convierte en un agente activo de su aprendizaje, pregunta en clases dudas, disfruta del ambiente en el aula y observa a un profesor bastante asequible. El docente tiene también fuerte presencia en redes sociales, su web o blog personal donde difunde conocimiento para el mundo, etc.
El neuroeducador
Es seguramente el perfil hacia donde debamos trabajar todos, el docente neuroeducador combina ciertas virtudes de otros tipos de docentes, su trato es cercano, afable, con gran empatía, aplica el principio de individualización de la enseñanza, intenta conocer la realidad de cada alumno, estimula con sus palabras hacia el aprendizaje, despierta interés por las cosas que imparte, educa para la vida, mejora la autoestima de los alumnos y favorece su motivación, pasea por el aula, interactúa con todo el alumnado, se preocupa por sus miedos e intereses, no le da la importancia al hecho de memorizar contenidos sino de saber aplicarlos en cada momento y que el alumno construya un pensamiento crítico contrastando diversas fuentes de información.
El neuroeducador se centra más en cómo aprende el cerebro de un alumno universitario que en la transmisión de conocimientos, su interés es que el alumnado ame la materia que imparte, la disfrute y venga a clase con ganas de participar en debates que se van creando. Utiliza estilos de enseñanza menos directivos y más exploratorios. Conjuga perfectamente la investigación y la docencia, cita autores en sus clases actuales y combina estos también con citación de trabajos clásicos.
Otros perfiles menos comunes
El anárquico
Suele tener días de buen humor y días de mal humor. Impone sus propias normas y no sigue de forma ordenada el temario de clase, en ocasiones deja a los alumnos abandonados en el aula en busca de sus intereses personales. Un día te saluda y otro día no saluda, posee altibajos en su docencia y no trata a todos los alumnos por igual.
El pirao
Simula a un científico loco, en ocasiones dice cosas sin sentido, suele utilizar a menudo muletillas que son heredadas entre promociones y promociones de alumnado. Presenta diferente actitud ante una misma circunstancia o hecho sucedido en días distintos. Tiene manías y las manifiesta a los alumnos.
El pasota
No le importa demasiado el aprendizaje del alumnado, suele dar las clases sin ganas y sin afrontar nuevos retos personales. Apenas se actualiza y año tras año imparte los mismos contenidos. Se muestra indiferente ante los comentarios personales que le pueden comentar los alumnos, tal como estuve enfermo y no pude venir a clase, etc.
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