¿Por qué los niños pequeños deben caminar descalzos?

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Hace miles de años, nuestros antepasados caminaban descalzos por diferentes terrenos. A medida que la civilización avanzaba comenzamos a fabricar primitivos zapatos utilizando materiales como pieles de animales y fibras vegetales. Estos primeros calzados proporcionaban una cierta protección contra el entorno, pero eran simples y funcionales. Hoy en día existe una enorme industria del calzado, pero… ¿Es bueno poner calzado a los bebés y niños pequeños en casa?

La industria del calzado

El calzado es actualmente una industria en auge, hasta el punto que podemos encontrar cientos de tipos de calzados para bebés y para niños de cortas edades. Calzados de diferente material, colores y marcas, desde las más prestigiosas a las menos populares. 

El calzado en principio cumpliría diferentes fines, desde protección del pie, a amortiguación, estabilidad y ligereza o pesadez dependiendo el objetivo de uso. En la literatura científica se ha discutido si realmente estos beneficios no eclipsan a otros beneficios que tiene caminar descalzos. Los estudios no son concluyentes debido a la dificultad de sus protocolos, pero parece que se inclina más a respetar el caminar descalzo en la primera infancia y niñez. 

Existen muchos factores que pueden influir en los resultados, desde factores de origen étnico, a hábitos de vida, alimentación y nutrición, tiempo descalzo, tipo de calzado, etc.

Caminar descalzo podría favorecer el desarrollo psicomotor del niño

Cuando el bebé y niños pequeños están descalzos su pie (cuerpo) es quien está directamente en contacto con la superficie. Esto implica un sinfín de sensaciones y percepciones que se traducen en mensajes para el cerebro de gran relevancia para el desarrollo del sistema psicomotriz. La propiocepción, el equilibrio, el control tónico y otros capacidades pueden verse favorecidas. Los músculos que se insertan en los diferentes huesos del pie también se fortalecen de diferente forma. Fijaos que cuando nos calzamos las zapatillas es la zapatilla quien en cierta manera nos amortigua el impacto y nos genera la fuerza. Al ir descalzos serán nuestros múculos los únicos protagonistas. Se dice que los atletas africanos que caminan y corren descalzos decenas de kilómetros diarios tienen lo que se denomina «pata de pájaro» un tendón de Aquiles con un gran desarrollo debido a su estimulación, y mientras ellos tardan en apoyar el pie escasos milisegundos los europeos tardamos más, lo que se traduce en un menor rendimiento si hablamos de competición en atletismo. 

Algunos estudios han constatado que los niños que estuvieron descalzos en la infancia desarrollaron un arco plantar más alto y un menor ángulo hállux (en estudio), observándose cambios morfológicos en el pie. También hay cambios en cuanto a la flexibilidad, estando esta asociada con mayor rendimiento en la carrera, y cambios morfológicos en cuanto al largo y ancho del pie. 

Os comparto algunas referencias de interés

Hollander, K., de Villiers, J.E., Sehner, S. et al. Growing-up (habitually) barefoot influences the development of foot and arch morphology in children and adolescents. Sci Rep 7, 8079 (2017). https://doi.org/10.1038/s41598-017-07868-4 

Gimunová M, Kolářová K, Vodička T, Bozděch M, Zvonař M (2022) How barefoot and conventional shoes affect the foot and gait characteristics in toddlers. PLoS ONE 17(8): e0273388. https://doi.org/10.1371/journal.pone.0273388

 


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