¿Es efectivo el uso de Kahoot en el aula?

Hemos sido muchos los profes que utilizamos desde hace años Kahoot en nuestras aulas. La plataforma ha resultado ser muy exitosa para mejorar la motivación del alumnado en clase y especialmente para crear un ambiente divertido y competitivo en el aula. Sin embargo, son pocos los estudios que han investigado, con un correcto protocolo científico, el impacto que puede producir esta herramienta tecnológica en el aprendizaje del alumnado. En este post te explico qué dicen las evidencias científicas.

Kahoot, una herramienta muy útil para el profesorado

Hace una década era impensable dar a cada alumno un pulsador para crear y utilizar encuestas en directo y que cada alumno pudiese participar respondiendo a múltiples preguntas presentadas de forma atractiva y dinámica. Este material, generalmente tenía que comprarlo el centro educativo o el docente, si este estaba muy motivado para mejorar el ambiente en el aula.

Kahoot ha irrumpido en educación con un alto impacto y con una gráfica ascendente de uso. No podemos negar su éxito y debemos felicitar a sus creadores la importante aportación que han hecho. Poco a poco, los profes de diferentes etapas educativas, los mejores comerciales que puede tener una herramienta educativa, fueron difundiendo su uso y experiencias en foros, libros, cursos y congresos y en algunos artículos científicos. Estos últimos constituyen quizá la debilidad de la expansión de Kahoot. Si bien es cierto hay muchos profes hablando muy bien de esta plataforma, en la literatura científica hay pocos estudios que abordasen con protocolos de investigación sólidos sus posibles beneficios en el aprendizaje del alumnado, en su motivación u otra variable vinculada al proceso de enseñanza-aprendizaje.

Una reciente revisión de literatura abordó el análisis de 93 artículos científicos

¿Qué debe mejorar para sacar un mayor rendimiento a Kahoot?

Las conclusiones de este estudio y de otro reciente trabajo (Diena R. et al. 2021) donde se analizó esta herramienta a través de la octalysis señalan algunas debilidades que deberían abordarse:

• Mejorar y/o corregir los problemas técnicos como conexiones a Internet poco confiables. Algunos alumnos indican que les va lento o pierden la conexión.
• Las preguntas y respuestas deben ser claras, sencillas y concretas, en ocasiones los estudiantes presentan dificultades para leerlas o interpretarlas.
• Se detecta cierto estrés del alumnado debido al tiempo insuficiente. Se debe adaptar el ejercicio a los ritmos de todos los estudiantes.
• El miedo a perder ha sido otro de los motivos de su no éxito.
• El haber fallado una respuesta puede desestabilizar al alumnado en las preguntas siguientes.

Como sugerencias de mejora de la aplicación se aportan estas:

• Dar posibilidad al alumnado que falla una respuesta de poder emitir otra respuesta.
• Poder personalizar la música dado que no siempre actúa como un elemento de motivación para todos los alumnos.
• Proyectar la pregunta en los dispositivos individuales del alumnado y no solo en la pantalla principal.

Los docentes también han señalado algunos aspectos a mejorar como por ejemplo el hecho de dar puntos por rapidez hace que muchos alumnos no piensen o reflexionen sobre la respuesta y se lancen a una sin leer todas las respuestas, otros maestros indican dificultades para entender la plataforma y diseñar los ejercicios en ella.  

Conclusión

Son necesarios más estudios y especialmente corregir estos aspectos señalados por otros investigadores en base a experiencias didácticas realizadas en el aula con Kahoot. Personalmente, lo he utilizado en diferentes materias pero en la actualidad ya no lo utilizo. Creo que el efecto novedad también afectó a la motivación de mi alumnado pero actualmente, al ver que muchos profes lo utilizan me da la sensación de que los alumnos en cierta manera ya han perdido la ilusión por esta plataforma. Será cuestión de buscar nuevas fórmulas y desafíos para seguir mejorando el aprendizaje.