En este post te presento 10 consejos para redactar la sección de referencias bibliográficas de tu trabajo de clase, trabajo de fin de grado, fin de máster o tesis doctoral.
Referencias bibliográficas VS Bibliografía
A menudo los estudiantes confunden estos dos términos, sin embargo hay un clara distinción entre ellos. La bibliografía hace referencia al material consultado para elaborar un trabajo. Es un término más apropiado para etapas educativas inferiores como Educación Primaria, pues no exiges al alumnado un alto nivel de citación, y ellos consultan un determinado contenido y luego hacen un breve resumen de este. Sin embargo, el término Referencias bibliográficas hace alusión a las fuentes de información consultadas y de las cuales has extraído información relevante para tu trabajo, incorporando las correspondientes citas textuales o parafraseadas en el texto. Es un término que se puede introducir en Educación Secundaria y Bachillerato enseñando al alumnado a utilizar correctamente el gestor bibliográfico que incluye Word y mostrando las diferencias entre bibliografía, referencias bibliográficas, estilo bibliográfico y cita bibliográfica. Sobre estos temas podéis aprender más en mi curso online Cómo redactar un artículo científico, abierto todo el año. Y en este otro post os expliqué como incorporar las normas APA 7ª edición al Word.
Vamos a ver cada uno de los 10 consejos que te quiero ofrecer en este post.
1. Utiliza un mismo estilo bibliográfico
Cada estilo bibliográfico cuenta con un determinado formato a la hora realizar las referencias bibliográficas. Algunos campos de conocimiento utilizan de forma preferente un determinado estilo, entre los que podemos encontrar: APA, Chicago, Harvard, Vancouver, etc. Debes consultar la normativa de tu universidad o de la revista donde desees publicar tu trabajo.
2. Conjuga citas actuales y clásicas
La riqueza de una buena sección de referencias bibliográficas se encuentra en la correcta conjugación de autores clásicos y actuales. Algunas revistas exigen que un determinado porcentaje de citas sean de los últimos 5 años. Esto es importante porque publicar actualmente un trabajo con citas antiguas puede no tener la calidad suficiente. Por eso, lo mejor es conjugar citas clásicas con solera y citas actuales de trabajos recién salidos del horno.
3. Revisa la coherencia entre las citadas en el texto y las referenciadas
Es un error típico poner algunas referencias que luego no están en el texto con su correspondiente cita, o viceversa, poner una cita y no incorporar la referencia al final del trabajo. La revisión de este apartado es clave.
4. Ofrece riqueza de autores y fuentes de información
Cuando observas un trabajo que tiene una gran cantidad de autores de diferentes países, artículos de diversas revistas, citas a libros relevantes, a conferencias, etc. es quizá un indicador de calidad de ese manuscrito. Evita abusar de citas a un mismo autor, revista o incluso país de publicación.
5. Incorpora los DOI a las fuentes de información que dispongan de él
Los DOI han irrumpido en el ámbito científico y de la publicación desde hace un par de décadas. Estos suelen ir incorporados al final de la referencia de cada fuente de información. Una manera muy sencilla de saber si tus fuentes de información consultadas tienen DOI es utilizando el buscador que nos ofrece Crossref, en este post te lo explico y puedes acceder a este buscador.
6. Evita el exceso de autocitas
Algunos autores buscan hacerse un hueco en la reputación científica citando sus propios trabajos en cada artículo que publican para conseguir así un mayor número de citas. El exceso de autocitas puede mermar la calidad de un trabajo y especialmente la reputación de ese autor. En este post te explico cómo saber el porcentaje de autocitas que tienen los autores e investigadores. No abuses de autocitas, solo incorpora las que sean muy necesarias.
7. No cites apuntes de clase no publicados
Este es otro de los errores más comunes que observo en los trabajos de fin de grado y máster, e incluso en algunas tesis. Un material que no está publicado no debe ser citable. Algunos expertos afirman que solo se puede referenciar la información a la que uno puede acceder libremente. En este sentido unos apuntes de una materia en la universidad a la que solo se pudo asistir un determinado año académico no es una fuente citable, pues quien lea tu trabajo no pueda acudir a ella. Solo en el caso de que ese docente tenga publicados sus apuntes serían citables.
8. Crea un número suficiente de referencias
A veces me preguntan cuántas referencias son oportunas en un trabajo científico, mi respuesta siempre es…pues dependerá del tipo de trabajo, si es un TFG, TFM, tesis o artículo de investigación. Y dentro de este último si es una revisión sistemática, un trabajo empírico, etc. No hay un número mínimo ni máximo, pero sí que es recomendable tener un número suficiente. Ya sé que no os estoy aportando nada con esta información, pero venga… digo cifras, sobre 30 referencias puede ser oportuno para un TFG/TFM, sobre 40-50 para un artículo científico, y más de 50 para artículos de revisión y tesis doctorales.
9. Utiliza un gestor bibliográfico
Ya hemos visto anteriormente que Word tiene un gestor bibliográfico muy sencillo de manejar y muy útil para enseñárselo al alumnado de Secundaria, Bachillerato, Formación Profesional y Universidad. Pero si buscamos mayores funciones en un gestor bibliográfico podemos irnos a Mendeley, Refworks u otros que permitirán jugar más con las referencias que podamos encontrar en las bases de datos y su exportación a nuestro artículo. El gestor bibliográfica facilita mucho la vida académica, y nos permitirá también obtener referencias bibliográficas en diferentes estilos bibliográficos con un simple click.
10. Cita el Chat GPT si lo has utilizado
Ahora que ya tenemos acceso a la inteligencia artificial es el momento de debatir acerca de si conviene citar al Chat GPT o no. Es una fuente de información sin duda alguna, ¿pero es citable?. La información que nos proporciona para una misma búsqueda de contenido suele ser diferente, por lo que quizá una persona que desee conocer más sobre nuestra referencia incluida en nuestro texto no pueda acceder a los mismos resultados que nosotros hemos citado y encontrado. Pero esto puede suceder también cuando citamos documentos web donde ponemos una fecha de acceso a esa información y esta información pudo haberse eliminado o modificado.
Lo cierto es que le he preguntado al Chat GPT si podíamos citar su referencia y dice que sí, que utilicemos esta forma de citarla si utilizamos la normativa APA.
Autor: OpenAI Año de publicación: 2020 (o año más cercano a cuando se entrenó el modelo)
Título: ChatGPT (o el nombre específico del modelo)
Editor: OpenAI URL: https://openai.com/models/ (o la URL específica del modelo)
Ejemplo:
OpenAI (2020). ChatGPT. OpenAI. Recuperado de https://openai.com/models/
Así que nada, a citar al chat. Lo que sí os recomiendo es no abusar de este tipo de referencias pues no son fiables al 100% y quizá sea más oportuno utilizar el chat para generar ideas o contenido y luego contrastar ese contenido con fuentes más fiables de información.
¡Deseo que os gustase este post!
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